jueves, 4 de marzo de 2010

acabando las vacaciones

Revivir un recuerdo es como cuando vuelvo a ver esas caras que quiero. Han pasado tantas cosas desde el día en que me fuí, y sin embargo... pareciera que todo sigue igual. Unas cuantos retoques por aqui y por ayá. Uno siempre espera algo de los demás, es una mala costumbre que hay que dejar atrás. La música suena fuerte. Y yo llego y no hay tantos mensajes para mi ni tampoco preguntando si estoy bien. Como una muy buena amiga mía, sé que el mundo no gira al rededor mío. Pero y entonces de quién? Gente va a trabajar, las casas se mantienen igual. Lo que odio de vivir acá es que nada de lo que cambia se logra ver. La gente lo está pasando mal. Y casi nunca es acá. La cordillera polvorienta se esconde detrás de los edificios para que no la veamos y el cielo como si tratara de mimetizarse con la ciudad.

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